LA BUSQUEDA
La mano tendida sobre el suelo. Algunos pastos, levemente más altos, desdibujan su fisonomía.
Arrecia el calor. El jinete recorre palmo a palmo el lugar. Sudor en la frente y el eco de los cascos de los caballos que despierta la mansedumbre de la hora. Vibra la tierra.
La mano en el suelo se mueve levemente. El jinete otea los cuatro puntos del horizonte.
Arrecia el calor. El caballo suda bajo un sol hiriente. La tarde duerme. Paso. Trote. Galope. Busca sin descanso, hurga en el aire, palpa gaviotas, desgajos de mar y de vientos.
La mano en el suelo vuelve a su inercia.
El sol cede. Las sombras desdibujan el paisaje. La silueta, resignada, se recorta contra una oscuridad cada vez mas profusa.
La mano en el suelo, se atreve. Se atreve en un puño.
Al galope, sale del paisaje, un jinete manco.
MONICA ARAMENDI